Los avances de la ciencia han logrado prolongar la esperanza de vida. Vivimos más y mejor, gracias a los grandes progresos en materia de medicina y hábitos de vida saludable. Las personas llegan a los 65 años en la plenitud de sus facultades y con muchas ganas de disfrutar de la vida.
Esto, es antes que nada, una gran noticia para toda la humanidad, pero es también un gran problema para las cajas jubilatorias de la gran mayoría de los Estados a nivel mundial. Y Argentina no es la excepción.
El sistema jubilatorio en Argentina es de reparto, lo que significa que las personas que trabajan son las que sostienen a los pasivos. Y por lo expuesto más arriba, entendemos que el número de personas pasivas no para de crecer y el número de activos cada vez es más pequeño en términos porcentuales. Pero también en términos nominales debido a las altas tasas de desempleo.
Dejar nuestro futuro totalmente en manos del Estado, ya no es una opción viable. La pregunta siempre es la misma ¿Vos, te imaginás viviendo con una jubilación? La respuesta en la gran mayoría de los casos es un rotundo NO. Entonces se vuelve imperativo tomar las riendas del asunto y comenzar a planificar nuestro retiro.
¿De qué se trata?
Es un instrumento de ahorro y capitalización que permite disponer de un ingreso complementario cuando concluye la etapa laboral o incluso antes. Es una solución práctica adaptada a la capacidad, necesidad o deseo de cada persona.
Se realizan aportes con la periodicidad elegida, las compañías invierten esos fondos y trasladan los rendimientos a las cuentas de sus asegurados. De esta manera se genera un fondo para el retiro con altísimos rendimientos financieros sin tener que ser un experto en inversiones, contribuyendo así a tu previsibilidad financiera y a un futuro mejor.
¿Cuáles son los beneficios?
*Los fondos están siempre protegidos con el marco legal de una póliza bajo normativa de la SuperIntendencia de Seguros.
*Todos los planes tienen rendimientos garantizados
*Son planes innembargables e inconfiscables
*Rápida disponibilidad
*Libre designación de beneficiarios
*Los aportes se pueden incrementar o reducir a lo largo del plan
*Beneficios fiscales; se pueden descontar de la base imponible del impuesto a las ganancias y no graba las rentas financieras
¿Cuándo comenzar?
No existe una edad ideal, pero cuanto más temprano se ingrese, menor será el importe que se deba destinar. Lo más conveniente sería en el mismo momento en que se ingresa al mercado laboral. De la misma manera que se descuenta del salario, un porcentaje destinado a la jubilación estatal, se debería comenzar a separar una parte con éste fin. Esta antelación permitirá utilizar el factor tiempo a nuestro favor, ya que los aportes estarán expuestos a interés compuesto y es justamente el largo plazo, lo que permitirá hacer crecer esa bola de nieve de forma exponencial, tal como lo definió el propio Einstein "El interés compuesto es la octava maravilla del mundo. El que lo entiende gana dinero, el que no, lo pierde"
Ciertamente, no es obligatorio tomar un seguro de retiro, pero si, muy recomendable. Solicitar a un asesor de seguros, una reunión consultiva para comenzar a delinear una planificación financiera es una de las mejores decisiones que podemos tomar para proteger nuestro esfuerzo, patrimonio y estilo de vida.